Hay un viejo refrán que reza, “lo que sube tiene que bajar”. Pero, ¿qué pasa si no se queda abajo? ¿Y si el proceso se sigue repitiendo? Bueno, pues entonces ¡ya no está subiendo ni bajando! ¡Está rebotando! No se nos ocurriría mirar un yoyó y pensar “¿no sería mejor que en lugar de estar abajo, estuviera arriba?” Antes de que llegásemos a terminar el pensamiento, ¡el yoyó ya estaría de nuevo arriba! Lo mismo pasa con tu situación actual. Tras la Luna Nueva las cosas volverán a la normalidad. Mientras tanto, relájate.