La máxima “calidad, no cantidad” nunca ha sido más importante. Pero es igual de importante que te tomes tu tiempo. Aunque en este preciso momento, es más fácil decirlo que hacerlo. Las fuerzas cosmológicas están azotando la atmósfera para crear una embriagadora sensación de urgencia y de este modo, sin darte cuenta, te estás dejando llevar por las energías inspiradoras que te rodean. No es que tu creatividad esté mal encaminada. Lo que pasa es que vale la pena que des un paso atrás y reconsideres una situación con calma y tranquilidad.