La ropa de decidimos ponernos influye. Cuando nos ponemos un traje o un uniforme, nos volvemos casi invisibles. Nuestra personalidad queda disfrazada detrás de la imagen que representa la ropa que llevamos. Vale la pena que tengas esto presente en la relación que mantienes con alguien que está representando un papel central en tu vida. Sólo por la imagen que proyecta, sería fácil considerar a esa persona un icono o el símbolo de algo. Si respondes a su corazón en lugar de a su papel, la comunicación será mucho más esclarecedora.