Nos dicen que el conocimiento es poder y que la ignorancia es dicha. Así que, ya que estas dos cualidades están en los extremos opuestos del espectro, ¿cómo se supone que debemos elegir entre ellas? La idea de sentirnos dichosos parece atractiva. Pero, para mantenerla, habría que permanecer en la ignorancia, lo cuál sería complicado. El poder no es ni la mitad de divertido tampoco. Viene de la mano de muchísimas responsabilidades. Sin embargo, el conocimiento está conectado a la sabiduría y tenerla sí que es algo maravilloso. Hoy estate abierta a la verdad.
