Un poco de desorden nunca origina un gran problema. En cuanto hayamos sacado la aspiradora, en un santiamén todo volverá a estar limpio y ordenado. Por otro lado, la basura psicológica es mucho más problemática. Podemos encontrarnos inmersos en ella y, si no tenemos cuidado, se nos olvidará que no era ella en lo que queríamos estar pensando. Hoy te vas a sentir tentada a aceptar una situación que sabes que está mal, simplemente porque no tienes la energía necesaria para arreglarla. Sé lo suficientemente fuerte como para hacer lo que hay que hacer.