Optimismo, amabilidad, calidez y delicadeza. Alegría, amor, risa, humildad y compasión. Generosidad y actitud abierta. Todas estas cosas son extraordinarias. Sin embargo, por la razón que sea, y a pesar de que las apreciamos, no consiguen atraernos tanto como parece que lo hacen el estrés, la lucha y la competición. Aunque tal vez no queramos admitirlo, a todos nos encanta el drama. Es convincente y fascinante. Entonces, ¿qué tiene para ti el día de hoy? Bueno, la respuesta sencilla es: ¡lo que quieras!