“Justo cuando pensaba que estaba fuera, vuelven a involucrarme” decía Michael Corleone en la tercera parte de El Padrino. Conforme Urano completa finalmente su transición a tu signo vecino, parte de ti está ansiosa por escapar de algo que ya no te sirve. Pero, justo cuando empieces a hacerlo, Mercurio cambia a retrógrado y hace que te replantees tu postura. Si puedes canalizar tu frustración y utilizarla para encontrar soluciones creativas, con la entrada de Marte en Géminis la semana después del equinoccio vas a poder consolidar tu posición poderosamente fuerte.