Algunas personas están tan fascinadas por los mecanismos que les encanta desmontarlos y volverlos a montar. Otras se centran en lo que mueve a la gente. Se quedan fascinadas con nuestros rasgos psicológicos y las diferentes características. A todos nos gusta saber cómo funcionan las cosas. Nos imaginamos algo y formulamos planes que se basan en nuestras conclusiones. Sin embargo, de vez en cuando necesitamos comprobar nuestros métodos. Es fácil que caigamos en malas costumbres y que saquemos conclusiones erróneas. El fin de semana te trae una revelación.