Tienes la sensación de que te han dejado a cargo del fuerte. Si miras por encima de sus murallas, esperas ver que se aproxima un ejército, marchando al son de los tambores y ondeando sus estandartes. Entonces, ¿dónde está la gente que te va a ayudar a defender el puesto estratégico que estás protegiendo? ¿Hay alguien contigo ahí? ¿Están los músicos de la corte distrayendo a todo el mundo? ¿o se está tentando a la gente con el festín que se está sirviendo? Por suerte estás a punto de darte cuenta de que posición no es tan vulnerable como parece.