¡Calla! ¡No digas nada! Vamos a hablar en voz baja para que nadie nos oiga. Si existe la posibilidad de que alguien esté mirando por encima de tu hombro, vete a un lugar donde no te vean. Bien. La noticia es que te has colocado en una posición en la que tienes la sartén por el mango. Esto significa que puedes olvidarte de tus sentimientos de ansiedad y duda pues ya no vienen al caso. Por lo tanto está bien que sigas adelante y hagas lo que en el fondo querías hacer. Vamos… haz tu jugada.