¿Te imaginas lo que podría pasar si alguien cometiera la travesura de echar suero de la verdad en el suministro de agua? ¿Qué pasaría si fuésemos incapaces de hablar sin correr el riesgo de revelar los pensamientos que reservamos para nosotros mismos y nuestros deseos más profundos? ¿Se destruirían las amistades? ¿Se arruinarían las relaciones? ¿Cuántos de los llamados “pilares de la sociedad” quedarían reducidos a meros mortales? No hay nada más poderoso que la verdad. Tu conciencia es mayor que la de los demás y ves más verdad que la mayoría de la gente. Hoy úsala con sensatez.