Desde luego que todo el mundo sabe que dos más dos dan ocho. Bueno, es así cuando sabemos que estamos sumando pares de zapatos. Aunque podrías decir que, a pesar de que hay ocho zapatos, sólo hay cuatro pares. Pero eso es rayar en la pedantería. Bien, volviendo a los zapatos, ¿dónde están? ¿Tienes tú alguno o lo tengo yo? Entonces, ¿por qué no los cuentas tú misma? Aunque hoy la vida te parezca complicada, si buscas la claridad, asegúrate de que sabes con qué te las estás viendo.