Cuando hablamos el mismo idioma que la gente con la que estamos intentando comunicarnos, es fácil asumir que nos comprendemos entre nosotros. Sin embargo, las palabras pueden ser ambiguas. Y muchas veces parece que estamos escuchando, aunque en realidad no estamos prestando atención. Tendemos a pensar que sabemos lo que van a decir los demás y, en nuestra cabeza, rellenamos las palabras por ellos. Al estar Mercurio volviendo sobre sus pasos en tu signo, hoy vale la pena que mantengas un ojo (y un oído) abiertos para que así puedas evitar saltar a conclusiones erróneas.