Imaginemos que has salido de compras. Estás en tu centro comercial favorito y ya has comprado el regalo perfecto para alguien especial. Te has pasado mucho tiempo pensando en qué comprar y estás contenta con lo que has elegido. Entonces, te enfrentas a la decisión de qué papel de regalo escoger para envolverlo. Deberías decidirte por el verde o por el rosa. ¡Vaya dilema! No es una decisión difícil pero te ha colocado en una situación de incertidumbre. Si esta semana ves que una decisión te está produciendo estrés, recuerda que es más trivial de lo que parece.