Cuando te propones encontrar problemas, pegas e inconvenientes, puedes dar por garantizado que los vas a encontrar. Al parecer el cosmos es generoso al respecto. Por suerte, cuando coordinamos esfuerzos para ver la alegría, la esperanza, la inspiración y el consuelo, se manifiestan con la misma facilidad. Estas cosas no se esconden de nosotros. Lo que pasa es que algunas veces se nos olvida buscarlas. Estamos tan alerta a la negatividad que se nos pasa por alto la belleza que nos rodea. Hoy busca lo que es bueno ¡y lo encontrarás!