¡Detente! ¡No pases de aquí! No leas ni una palabra más de tu predicción. ¿Qué pasa? ¿Vas a hacer caso omiso de esta advertencia y a seguir adelante, pase lo que pase? Ah, crees que no lo digo en serio. No te preocupan las consecuencias de ignorar mi consejo. Entonces, todo lo que tienes que hacer ahora, es adoptar esta misma actitud ante una figura de autoridad que te está intimidando. El solsticio aporta la dosis de valor que necesitas para ser capaz de imponerte y seguir confiadamente con tu plan actual. ¡Manos a la obra!