¿Cómo fue el principio? Nadie puede acordarse de ello. No hay nada a lo que remitirse. Es imposible encontrar la manera de comparar lo que va a pasar con lo que ocurrió antes de que todo comenzara. Probablemente es lo mejor, ya que se ve que nos gusta estar a salvo en la mitad de nuestra vida, no demasiado cerca de ninguno de los dos extremos. Nos sentimos más cómodos cuando estamos contentos con lo que hemos experimentado y esperamos con ilusión lo que está a punto de ocurrir. Este fin de semana, la superluna aumenta tu entusiasmo por el futuro.