Imagínate que te has perdido en un desierto. Estás cansada y deshidratada, tienes una sed que hay que saciar. Al encontrarte con una pequeña poza llena de agua estancada, decides correr el riesgo y beberla. Cuando has bebido la suficiente para sentirte mejor, te das cuenta de que en el horizonte se divisa un lago de agua fresca y dulce. Esta es la clase de error que debes tener cuidado de no cometer esta semana. Como Venus, tu regente, se vincula a la Luna Llena, no hay necesidad de que te las arregles con algo de inferior calidad. Un poco de paciencia dará para mucho.