Cuando el poeta Khalil Gibran escribió sobre la fe, la describió como el “oasis en el corazón al que nunca podrá llegar la caravana del pensamiento”. Pero sin duda la mente puede ir a donde queramos que vaya ¿no? Nuestros pensamientos y nuestra imaginación pueden llevarnos de viaje a lugares remotos con los que sólo hemos soñado. Pero, aunque podamos invocar cualquier situación, no podemos fabricar la fe. La fe viene únicamente del corazón. Y sólo se puede llegar al corazón cuando nuestros pensamientos guardan silencio. Hoy escucha al tuyo.