Hay gente que decide beber agua procedente de manantiales de montañas lejanas. Otras están más que contentas con saciar su sed bebiendo agua directamente del grifo. ¿Puede alguien notar la diferencia? Bueno, supongo que la gente que invierte en las cosas caras piensa que sí puede notarla. Pero tales distinciones son subjetivas. A veces las cosas nos saben mejor porque pensamos que «deberían» y somos muy desgraciados si alguien intenta decirnos lo contrario. Hoy asegúrate de que estás respaldando un plan en el que realmente crees.