Como Venus y Saturno se vinculan, te traen la oportunidad de volver a evaluar un compromiso emocional que habías contraído. Se trata especialmente de un acuerdo que concertaste hace poco. Firmaste un contrato emocional, ¿no? ¿No tienes que registrar todos los momentos amables y los favores para asegurarte de que todos paguen sus deudas y reciban sus justas recompensas? Por suerte nuestro mundo no está construido sobre esta clase de entendimiento. El cosmos te ofrece una nueva dirección. Tienes a tu disposición un sistema de apoyo más fuerte, por si lo quieres.