Tendemos a pensar que franqueza y sinceridad son la misma cosa. Sin embargo, la verdad es tan poderosa como maravillosa y exige que la traten con respeto y delicadeza. Hay un tiempo y un lugar para hacer frente a los hechos – y esto varía para cada uno de nosotros. Incluso cuando no nos queda otra opción que la de enfrentarnos a ellos, no estamos obligados a fijarnos en ellos con tanta constancia que acaben ocultando todo lo demás. Mientras estés bajo la influencia de la superluna del equinoccio, piénsate bien lo que realmente tienes que decirle a cierta persona.