Cuando llegas al final de la carretera y parece que no hay donde ir, sólo te queda una opción… dar media vuelta. Cuando una ruta en particular no ofrece más opciones, no tiene sentido que te empeñes en seguir adelante. Tienes que considerar la posibilidad de dar la vuelta y volver por donde has venido. Tal vez se te pasó algo por alto, o podrías haber aprovechado mejor una oportunidad. La proximidad de la Luna Llena sugiere que, al dar un paso atrás, puedes dar un paso positivo hacia adelante.