Dicen que la confianza te favorece. Igual que un caro traje italiano, te hace parecer equilibrada, profesional y al mando (y además llama la atención). Pero todo traje necesita de vez en cuando una limpieza en seco. Así que hay momentos en los que inevitablemente tienes que enfrentarte a ti misma tal y como eres, contemplar directamente en el espejo tus dudas, tus miedos y cualquiera de tus carencias. Sin embargo, un conjunto tuyo en particular lleva demasiado tiempo en la tintorería. Ha llegado el momento de que cambies los pantalones vaqueros del riesgo por el traje del éxito.