Tómate un momento para dejar lo que estás haciendo y echarle un vistazo al mundo que te rodea. La extraordinaria arquitectura, los impresionantes paisajes. Muchas de estas cosas ya estaban aquí cuando llegamos y seguirán por aquí mucho después de que nos hayamos marchado. Ser conscientes de nuestra mortalidad hace que nos sintamos incómodos. Sin embargo se puede encontrar consuelo al saber que, a pesar del tamaño de los retos que vivimos, son extremadamente pequeños dentro del gran esquema de las cosas. Encuentra la libertad en ese pensamiento y hoy da un valeroso paso adelante.